La doble fachada es un recurso común para generar sombras y disminuir la cantidad de luz y calor que recibe un edificio en una de sus caras, y es un recurso que hemos abordado con relativa frecuencia en este blog.
Sin embargo creo que es la primer vez que presentamos una sostenida por tensores, que además tiene la posibilidad de cambiar y adatarse a las necesidades estéticas y de confort de sus usuarios.
ANTES DE LA INSTALACIÓN DE LA FACHADA COLGANTE
Este proyecto ubicado en Austin, Texas, realizado por el Estudio Bercy Chen tiene esta curiosa particularidad. Compuesto por cuatro niveles en los que aloja viviendas, oficinas y tiendas es un gran volumen rectangular con una animada fachada colgante de paneles de color rojo brillante soportados por tensores que a sus vez dependen de una estructura en la parte superior del edificio.
Sin embargo creo que es la primer vez que presentamos una sostenida por tensores, que además tiene la posibilidad de cambiar y adatarse a las necesidades estéticas y de confort de sus usuarios.
ANTES DE LA INSTALACIÓN DE LA FACHADA COLGANTE
Lo interesante de esta solución es su gran flexibilidad, ya que los paneles pueden cambiarse con relativa facilidad, lo que permite 'remodelar' la fachada las veces que queramos o necesitemos hacerlo. Sin duda un buen ejemplo de economía y versatilidad aplicados a la arquitectura.
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